La inversión inmobiliaria alternativa se está consolidando como una vía real y eficaz para quienes buscan rentabilidad atractiva y respaldada con garantías reales. Frente a un entorno donde los bancos endurecen condiciones y los productos tradicionales ofrecen rentabilidades limitadas, plataformas de financiación colectiva como el crowdlending emergen como una solución directa, transparente y respaldada por activos reales.
En este nuevo escenario, plataformas como Civislend están demostrando que es posible financiar el desarrollo inmobiliario de forma eficiente, regulada y accesible, con resultados medibles y con las rentabilidades del sector inmobiliario.
Y en lo que lleva de 2025, Civislend ya ha ofrecido a sus inversores una rentabilidad media anual del 11,45% en sus proyectos, consolidando una tendencia que sitúa esta fórmula de inversión como una de las más competitivas del mercado.
Alternativa, pero cada vez más habitual
España concedió en 2024 más de 10.700 millones de euros en financiación mayorista al sector inmobiliario, de los cuales más del 20% ya no vinieron de bancos, sino de fuentes como las plataformas de financiación participativa. Ese giro revela un cambio de lógica: no solo importa quién presta, sino cómo y con qué condiciones.
Y es en ese "cómo" donde el crowdlending inmobiliario —un modelo que permite a muchas personas financiar proyectos inmobiliarios reales entre todos— ha multiplicado su alcance en tiempo récord.
Entre las plataformas, Civislend se sitúa como la referencia, ha demostrado durante el primer trimestre de 2025 un crecimiento que no pasa desapercibido: más de 32 millones de euros financiados solo en el primer trimestre, un 71% más que en 2024, y 12 proyectos residenciales apoyados por miles de inversores.
¿La clave? Sencillez, trazabilidad, rigor y transparencia. La plataforma está registrada como PSFP en la CNMV desde su nacimiento en 2017, permite invertir desde solo 250 euros, lo que ha democratizado la entrada a este sector y ofrece rentabilidades medias de dos cifras: 11,62% en 2024, con plazos de retorno de unos 15 meses, muy por debajo de otros instrumentos.
Además, cada proyecto cuenta con garantías reales, que protege la inversión: hipotecas, avales o pignoraciones, que refuerzan la seguridad de quien decide participar.
Las necesidades del mercado no se detienen: se estima que entre 2025 y 2027 el sector requerirá más de 72.000 millones de euros en financiación, especialmente en promociones residenciales en venta y en alquiler. Muchas promotoras medianas no pueden esperar a que el banco diga "sí". Y muchos ahorradores buscan algo más que fondos impersonales o depósitos con rentabilidades mínimas.
Civislend conecta esos dos mundos: capital privado e inmobiliario profesional, de forma directa, digital y controlada. Es una solución útil para quienes buscan rentabilidad, pero también para quienes valoran saber dónde va su dinero.
¿Por qué cada vez más personas se interesan por este modelo?
Porque no necesitas ser un experto financiero. Toda la información relevante de cada proyecto —analizada previamente por el equipo de Civislend— está disponible en la plataforma para que tomes decisiones con criterio y confianza.
Porque no hace falta constituir empresas ni firmar escrituras. Civislend actúa como intermediario regulado, facilitando todo el proceso de inversión de forma digital, directa y sencilla.
Porque permite diversificar tu capital con mayor control. Al poder invertir desde tan solo 250€, permite diversificar en varios proyectos, con bajo riesgo individual y total visibilidad sobre dónde va tu dinero. Es una forma inteligente de proteger tu patrimonio y hacerlo crecer.
Porque estarás informado en todo momento. Cada tres meses, recibirás un informe directamente del promotor con el avance del proyecto, para que sepas exactamente cómo evoluciona tu inversión.
Civislend demuestra que el pequeño inversor también puede jugar en primera división. El dinero parado pierde valor. Civislend lo pone a trabajar por ti, con respaldo real y rentabilidades de doble dígito.